sábado, 14 de abril de 2012

Las tijeras llegan también a los orientadores laborales


Somos conscientes que entre nuestros lectores, no sólo hay personas que buscan trabajo sino que otras muchas se acercan a nuestras páginas para recoger información o incluso para ayudar a este colectivo con sus aportaciones.
Nos visitan desde distintos ámbitos pero uno de los más importantes es el que se refiere a los profesionales de la orientación laboral, especialmente para aquellos que han considerado que podemos ser una herramienta útil para su trabajo. Hoy, por tanto, queríamos tener un recuerdo para ellos porque, como dice el título, algunos ya empiezan a sufrir los tijeretazos también....
Seguramente alguno de los lectores nos pueda contar alguna mala experiencia con algún orientador laboral y otros muchos, podrán prestar testimonio del gran trabajo que realizan estos profesionales. Empiezo por aquí porque creo que a veces, somos un poco injustos a la hora de evaluar el trabajo de una persona cuya principal misión es acompañarnos en la búsqueda de empleo, orientarnos pero sin buscar milagros donde no es posible.
Como en toda actividad, hay excelentes profesionales, otros que se limitan a ser correctos y finalmente, unos malos o muy malos. ¿Pero acaso no ocurre lo mismo con los periodistas por citar la profesión a la que pertenezco? ¿Y no has tenido tú en tu trabajo compañeros para todos los gustos y colores? 
El caso es que debemos hacer un esfuerzo de empatía en muchas ocasiones. El trabajo de orientador laboral, ya sea en los servicios públicos de empleo, en otras instituciones públicas o en entidades con un departamento específico, se ha desarrollado enormemente con la crisis. Ya antes existían muchos trabajadores en este ámbito, pero el foco de nuestras esperanzas no estaba puesto en ellos de forma tan determinante como ahora.
El problema viene cuando nos encontramos con un mercado laboral que tiene movimientos mínimos y las oportunidades de trabajo escasean. A todo esto se suma que los orientadores laborales han recibido una avalancha de personas en busca de ayuda. Quizás me equivoque pero tengo la impresión de que la inmensa mayoría tienen a su cargo el asesoramiento de un número de desempleados muy superior al que aconsejaría el sentido común para garantizar su eficacia. Y claro, las “tortas” de nuestra frustración se las llevan ellos que son los que nos ponen la mejilla.
Nosotros, como Portalparados, podemos dar fe del trabajo de muchos de ellos que nos siguen habitualmente, que nos ofrecen su aliento, que difunden nuestros contenidos o nos proporcionan otros con el objetivo de ayudar a las personas que buscan empleo. Tenemos constancia de la generosidad de muchos de ellos, de la vocación por ayudar a los que buscan trabajo en estos difíciles momentos. Por supuesto que no a todos les caemos bien, hay una minoría que nos miran con un cierto recelo sin tener motivo para ello. Pero son eso, una minoría, por fortuna.
El caso es que en las últimas semanas, hemos recibido correos o mensajes en las redes sociales en las que nos cuentan, por ejemplo, que muchos de los orientadores de Funcatra, en Canarias, han sido despedido o que los profesionales del SOC, en Cataluña, han visto mermado su sueldo, y sus horas de trabajo, de forma muy importante. Son consecuencia de esas tijeras que nuestros gobernantes están sacando a troche y moche.
La reducción del presupuesto en políticas activas de empleo, previsto por el gobierno, incidirá seguramente en el número de orientadores laborales que atienden en la actualidad a los desempleados y eso es una mala noticia, muy mala, diría yo. Precisamente lo que necesitan las oficinas de empleo son más profesionales de la orientación, más personas de esas que nos digan “te ayudamos a buscar trabajo” en lugar de limitarse a tomar nota de nuestros estudios y experiencia profesional.
Por eso, y con total modestia, hoy quiero brindar nuestro apoyo a este colectivo, un apoyo egoísta, en realidad porque su presencia es útil, muy útil en los momentos que corren. Sin ellos, las cosas serán más difíciles y espero que prime el sentido común de quienes, tijera en mano, no reparan en las consecuencias de los recortes en algunos ámbitos.
Javier Peña
Director Portalparados.es

Fuente: Portalparados

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